Leche de Coco: El crisol joven de los sonidos afrocaribeños

El grupo tico de calipso Leche de Coco, basa su propuesta en un crisol de sonidos afrocaribeños enriquecido por el estudio y las diferentes apreciaciones del calipso, que aporta cada uno de sus integrantes. En esta edición de El Amplificador tuvimos la oportunidad de penetrar en su mundo y obra, hablamos del movimiento calipsonian en Costa Rica, también disfrutamos de música en vivo a cargo de Diana Avellán y Ramón Morales.

A través de la música de Leche de Coco nos transportamos a las calles de Limón, las palmeras, los cocos, la brisa, el mar, el alma del caribe y el calor de su gente. Los sonidos medulares del quijongo, las trompetas y banjo; el golpeteo de las tumbadoras, maracas, la conga y el güiro, dan vida a su propuesta musical.

Algunas de las piezas que esta agrupación ha grabado son autoría de compositores costarricenses y hablan de la cualidad de lo cotidiano, el amor y desamor, la identidad y relatos de vivencias propios del calipso, un género que nació como medio de comunicación para resistir la época colonialista.

“Si las fronteras las hiciera la cultura no habría frontera entre Bocas del Toro (Panamá) y Limón (Costa Rica), igual con Bluefields en Nicaragua”

Ramón Morales, Leche de Coco.

La obra musical de Leche de Coco tiene como referencia a grandes figuras del calipso en Costa Rica como Shantí, Marcos Forbes, Manuel Monestel y Walter Ferguson. Sus integrantes combinan la experiencia en otras agrupaciones nacionales como Taforem, Los Ceibas, Kawe Calipso y Cacao con la inventiva propia.

Actualmente Leche de Coco se encuentra componiendo canciones de su autoría, al mismo tiempo que continúan explorando y descubriendo paso a paso su sello característico, en un momento que consideran crucial para la cultura del calipsonian. En este proceso, resaltan la importancia de nuevas agrupaciones dentro del movimiento de calipso costarricense como Las Chicharras, The Good Friends y Calipson.